"810", el giro en la búsqueda de Trementina.

Como ellos mismos habían anunciado "SPD" su EP del 2015 seria un trabajo que daría paso a una nueva etapa para la banda, dejando atrás en cierto modo su primer ciclo. Se podría decir que  ese primer ciclo estuvo marcado por el aprendizaje y las situaciones  que los vieron dejar atrás su natal Valdivia y empezar a recorrer no solo Chile sino el mundo.No por nada Trementina ha sido una de las bandas chilenas con mayor recepción en el exterior estos últimos años, esto vino apoyado en un interés que nació desde casi su momento cero cuando el sello japones  Vinyl Junkie Recordings editó su trabajo debut (Brillant Noise, 2015). ¿Que  ha cambiado para este nuevo trabajo? ¿Es Trementina la misma banda que hace dos años? En parte si, en parte no. Ya no son los mismos pues su baterista original  Simón Cárdenas tuvo que dejar la banda para dedicarse a proyectos personales, los sentimientos surgidos por esta situación están en parte  plasmados en "Please, please go away" primer single y primer tema "810" su nuevo disco editado por Burger Records.

Ahora completados por Andrés Yáñez como baterista, el mas importante giro es el musical. Para quien conoce a Trementina "810" puede resultar un trabajo atípico para una banda que literalmente creaba tormentas con las guitarras. Al igual que su portada, este es un disco mucho más prístino y brillante construido sobre  bases de teclados, secuencias y guitarras mucho mas limpias que logran crear paisajes de sonido. La guitarra y el bajo buscan crear ritmos mas contundentes lo que logra que las canciones sean mucho mas expresivas y detallistas. El trabajo vocal de Vanessa Cea es mucho mas esmerado, en parte gracias a que la base sonora se ha aligerado permitiendo que las voces jueguen un rol mas central sin funcionar simplemente como un trasfondo para las guitarras. Es por eso que este disco tiene los temas mas entretenidos en ese sentido, canciones que brillan por la voz como "A place up in the sky" o "Oh Child".

Según la banda el titulo es una referencia al numero de kilómetros que hay entre la Plaza de Armas de Santiago y el lugar donde fue grabado este disco, "810" fue grabado en medio del campo y muy lejos de la ciudad y eso es algo que se nota en el tono meditativo y calmado de canciones como "All I wanted". Este 2017 ha encontrado a la banda afrontar muchos nuevos horizontes, durante los meses anteriores tenían prevista su presentación en dos grandes festivales: El Festival Nrmal en México D.F y el SXSW en Austin,TX tras el cual darían algunas otras fechas organizadas por Burger Records su nuevo sello . Sin embargo la banda vivió la misma situación que pasaron muchas otras agrupaciones este año con el SXSW ya que incluso antes de viajar a Estados Unidos fueron notificados que su visas previamente aprobadas habían sido revocadas. Aunque el sinsabor debió ser grande, Trementina rápidamente se repuso y termino organizando una gira por México donde se presentaron en múltiples ciudades.

Aunque tanto en el sentido musical como humano no veo necesario calificar a Trementina como una banda  "madura" sino mas bien todo lo contrario (capaces de divertirse tanto haciendo música como en cada situación buena o adversa), es impresionante todo lo que han crecido en escasos 4 años. Viéndolo en retrospectiva han pasado apenas dos años entre aquel debut que los presento al mundo y este nuevo trabajo. Las diferencias son importantes y este nuevo disco es prueba de ello, asi como también de su ambición: hubiera sido fácil repetir formulas y lograr algo bueno y vendible, sin embargo "810" suena fresco e innovador, deja de un lado la sombra de My Bloody Valentine o Ringo Deathstar y los lleva a terrenos mas personales. Sin ser un álbum pensado es un disco coherente en muchos detalles ya que desde lo sonoro, visual y el nombre crea un concepto.

Editado por Burger Records en vinilo, cassete, Cd y digitalmente estos chilenos tienen por delante un brillante 2017.