domingo, 7 de mayo de 2017

Editorial: ¿No hay nuevos sonidos? o ¿Nos estamos quedando sin etiquetas?

Sobre la música actual se suele decir que no hay nada nuevo, que los nuevos artistas son una repetición de formulas y géneros que llevan años existiendo. En parte estoy de acuerdo en otra parte en desacuerdo. Por una parte la idea de "nuevo" hace parte de una concepción moderna, no del arte, sino de la vida. En un mundo donde todo esta disponible a la distancia de un click, recibir nuevas emociones es una parte clave de mantener un frenesí que no solo se limita a la música. Vivimos una época en que todo debe ser emocionante, nuevo y deslumbrante (la comida, le educación, los juegos, todo lo que envuelva los sentidos) esto hace que la vida  útil de cualquier cosa sea limitada y pasajera, los 15 minutos de los que hablaba Andy Warhol son hoy en día con suerte 15 segundos. Tal vez no nos damos cuenta pero esto hace que nuestra percepción de las cosas sea distinta, es difícil saber mas allá del "thrill" inicial si algo es bueno o malo, o llegar incluso a ir mas allá de ese primer golpe.

Las categorizaciones, es una manera fácil y simple de asignarle un valor previo a las cosas.  Es mas sencillo ponerle una estrella, un numero o un genero a algo que entrar a ver la historia que lo rodea. Creo que todos tanto como productores como consumidores hemos asumidos una posición cómoda ante esta situación. Bajo esa premisa de comunicación los medios (tanto grandes como chicos) nos hemos ido moldeando a la premisa que hay que llamar la atención, ofrecer ese rush de adrenalina de la manera mas certera. Esta situación esta bien representada en el fenómeno del titular, el cual según el estándar actual debe ofrecer ya todo lo que el lector debería saber, el click posterior es una barrera infranqueable que pocos suelen pasar para en vez ir directamente a los comentarios, creando así un proceso curioso en el cual es posible tener una opinión sin siquiera saber a fondo de que se habla.

 ¿Quien es el culpable? Todos somos complices, los que escribimos solemos ser cómodos y crear contenido cada vez mas barato, el cual permita obtener medidas imaginarias (likes, comentarios, básicamente visibilidad en un mar lleno de peces). Los lectores olvidamos el papel critico que jugamos ante los medios y seguir siendo parte del festín. Hace algunos años se pensó que el Internet sería el medio que nos ofrecería una vía libre y democrática de acceso y uso de la información, lamentablemente poco nos enseñaron a usarla y hoy en día parece mas un placebo que otra cosa. Esto, para mi, hace parte de un engranaje. Los medios "grandes" ofrecen opciones vacías que pueden ser digeridas sin siquiera abrir la boca (los ojos, los oídos, la cabeza), nosotros nos acostumbramos a tragar lo que nos dan. Es un imperio de ciencia ficción que preferimos ver en Netflix. 

Podría extenderme mas en esto, pero pasando al tema que ha ocupado este espacio por ahora casi ya 6 años. ¿Como afecta esto nuestra capacidad critica y nuestra percepción? En un espacio como el latino americano, donde la idea de que somos una cultura de segunda mano parece ser perfectamente aceptada por buena parte de sus pobladores hay particularmente una visión muy cerrada sobre lo que se hace artísticamente (no solo en la música sino en otros terrenos como la literatura o el cine). No voy a ser generoso con los que crean, pero creo que el problema es casi mas parte de los consumidores, buena parte de la critica musical actual, por ejemplo, no ejerce un trabajo mas allá de replicar noticias internacionales en su propio idioma, es decir, no se crea contenido solo se replica. Claramente es mas fácil atraer lectores escribiendo sobre proyectos ya establecidos, razón por la cual al momento de hablar de lo que se hace localmente es mas fácil hacer el mismo ejercicio: comparar una banda como una replica de otra, usar y abusar de  categorías que no son del todo nuestras, considerar que somos un espejo cultural atrasado de lo que pasa en Europa y Estados Unidos. 

Creo que es importante construir una cultura propia y parte de este proceso es construir nuestra propia identidad del lenguaje. Vivimos una época hiper globalizada e hiper conectada, nosotros como latino americanos estamos en un punto de inflexión importante como cultura, es claro que mucho  de lo que hemos creado es parte de un legado impuesto (nuestra propia lengua lo es) pero parte de reivindicarnos es construir una identidad mas allá de esos limites. Debemos aceptarnos y vernos como parte de un proceso complejo que ha creado grandes movimientos sociales, culturales y artísticos. Para mi estos 6 años han sido importantes para ver eso justamente y pasar de ser un espectador a ser un actor, considero que el cambio tanto estético como en el nombre de Latino América Shoegaze apunta a encarar un proceso mas critico y honesto de nuestra propia cultura:

Sonidos que Permanecen.

Diseño artístico por Colakuerno

"Sonidos que Permanecen" es un sitio fundando en el 2011 bajo el nombre de Latino América Shoegaze, se centra en la exploración y difusión de la música latinoamericana enmarcada en la búsqueda sonora y los movimientos culturales independientes (tales como los sellos discográficos y radios). Su nombre hace énfasis tanto en las virtudes de ciertos sonidos (la repetición, reverberancia y permanencia) como en el sentido de permanencia de la música en la era moderna buscando dar un lugar a proyectos de esta parte del mundo.

"Sonidos que permanecen" is a musical site founded in 2011 under the name of "Latino América Shoegaze", if focuses on the exploration and promotion of latino american music within the frames of sound exploration and independent cultural movements like record labels and radios. Its name emphasizes certain virtues of sound such as repetition, reverberation and permanence and also the sens of contuinity of music on the modern era trying to create a place for the projects of this side of the world.

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